Durante muchos años me he dedicado a la enseñanza de pádel. He tenido alumnos de todas las edades: niños adultos, seniors y desde niveles de iniciación a los que ya competían a un alto nivel.
Todos los años sin excepción, recibía de alguno de mis alumnos el comentario típico de “me está empezando a doler el codo…”. A veces la respuesta a esta cuestión no es fácil, ya que influyen diversos factores que uno junto al otro provocan esta molestia: ¿la pala?..¿el grip?..¿una técnica inadecuada?..¿falta de fuerza?.
¿Qué puede producir esa lesión conocida por todos como codo de tenista, epicondilitis o epicondilálgia?
Pues para dar respuesta a esa incógnita repasemos juntos las diferentes causas posibles:
1.Tipo de pala:
La elección de la pala no solo afecta tu rendimiento en la pista, sino también tu salud a largo plazo. La variedad de palas en el mercado puede resultar abrumadora, pero es crucial encontrar la pala que se adapte a tu nivel de juego y condición física. Las palas varían en peso, forma, equilibrio y materiales de fabricación. En general, las palas más ligeras suelen ser menos exigentes para el codo, mientras que las de mayor peso, que aumentan la potencia de golpeo, generan además más la tensión en dicha articulación. Yo siempre recomiendo empezar por una tipo redonda y que esté equilibrada o al menos de bajo peso.
2.Balance y Composición:
El balance de la pala, ya sea hacia la cabeza (balance alto o cabezona) o hacia el mango (balance bajo), afecta al impacto sobre la pelota, es decir, al golpeo. Un balance equilibrado ayuda a distribuir mejor la fuerza ejercida sobre el codo. Además, las palas fabricadas con materiales como la fibra de carbono o la fibra de vidrio pueden reducir las vibraciones y minimizar el impacto en el codo. No quieras tener la pala del número uno si no está adaptada a tus condiciones: te gastarás un dinero innecesario y tendrás que ir pronto a tu fisioterapeuta a tratarte.
3.Tamaño y grosor del grip:
El tamaño del grip (empuñadura) de la pala es fundamental para mantener un buen agarre y evitar lesiones en el codo. Un grip demasiado fino puede aumentar la presión sobre los músculos del antebrazo, mientras que uno demasiado grueso puede dificultar un buen control de la pala. Encontrar el grosor adecuado puede marcar la diferencia en la prevención de lesiones. En mi opinión prueba a jugar con uno o dos overgrips y al final de esos partidos comprueba como está tu musculatura.
4.Técnica y Entrenamiento:
Además de la elección de la pala, es esencial que trabajes en tu técnica y recibir orientación de un monitor experimentado. Una mala técnica al golpear la pelota puede contribuir significativamente al desarrollo de lesiones en el codo, especialmente en el revés. Esto lo he constatado durante mi dilatada como profesor; en niveles de iniciación, se recurre en demasía al juego de muñeca.
Ya sabes, para disfrutar de este magnífico deporte, es esencial que se comience con ciertos conocimientos técnicos para que no aparezcan las lesiones o al menos prevenirlas.
En Promove Fisioterapia tenemos un amplio bagaje clínico en fisioterapia deportiva y podemos ayudarte con esta incómoda e invalidante lesión. Es importante una buena gestión de la lesión y que no hagas compensaciones y que no se cronifique la misma.
Jorge Mora – Fisioterapeuta col. nº12225
¡Hasta otra!